Cuando hablamos de inmigración a Estados Unidos, es común escuchar los términos “ciudadano” y “nacional” como si fueran lo mismo.
Sin embargo, en la ley de inmigración estadounidense estas dos palabras tienen significados distintos. Y esa diferencia puede afectar los derechos y responsabilidades de las personas.
Entender esta diferencia es importante, sobre todo si naciste en algún territorio estadounidense o estás considerando la naturalización.
Qué significa ser ciudadano estadounidense
Un ciudadano de Estados Unidos es una persona que posee todos los derechos y responsabilidades que otorga la Constitución y las leyes del país.
Hay tres formas principales de convertirse en ciudadano estadounidense:
- La primera y más común es nacer en suelo estadounidense. Si naces en cualquiera de los cincuenta estados, el Distrito de Columbia, Puerto Rico, Guam o las Islas Vírgenes de Estados Unidos, te conviertes en ciudadano al momento de nacer automáticamente. Este principio se conoce como derecho de suelo.
- La segunda forma es nacer fuera de Estados Unidos, pero de padres que son ciudadanos estadounidenses. En este caso, la ciudadanía se transmite por derecho de sangre, aunque deben cumplirse ciertos requisitos de residencia de los padres.
- La tercera manera es mediante la naturalización, que es el proceso legal por el cual un residente permanente pide convertirse en ciudadano después de cumplir con requisitos específicos establecidos por el Congreso. Esto incluye vivir en Estados Unidos durante cierto tiempo, aprobar un examen de ciudadanía y prestar juramento de lealtad al país.
Los ciudadanos estadounidenses disfrutan de derechos completos que incluyen:
- Votar en elecciones federales y estatales.
- Postularse para cargos públicos.
- Trabajar en ciertos puestos gubernamentales que requieren ciudadanía.
- Obtener un pasaporte estadounidense y viajar con la protección diplomática del país.
También tienen responsabilidades, como servir en un jurado cuando sean llamados y registrarse para el servicio selectivo si son hombres entre 18 y 25 años.
Qué significa ser nacional estadounidense
Un nacional de Estados Unidos es una persona que debe lealtad permanente a Estados Unidos, pero que no necesariamente es ciudadano.
Este es un concepto menos conocido y aplica a un grupo muy específico de personas.
Bajo la ley de inmigración actual, todos los ciudadanos estadounidenses son también nacionales estadounidenses, pero no todos los nacionales son ciudadanos. La diferencia radica en que existen algunos nacionales que no poseen ciudadanía completa.
Las personas que nacen en Samoa Americana o la Isla Swains son nacionales estadounidenses, pero nos son ciudadanos al momento de nacer. Estos son los únicos territorios que actualmente otorgan el estatus de nacional sin ciudadanía.
Históricamente, las personas nacidas en Guam, Puerto Rico, las Islas Vírgenes y Filipinas también fueron nacionales sin ciudadanía en ciertos períodos, pero las leyes cambiaron y ahora quienes nacen en Guam, Puerto Rico y las Islas Vírgenes son ciudadanos plenos desde el nacimiento.
San Juan, Puerto Rico
Además, las personas nacidas fuera de Estados Unidos y sus territorios de padres que son ambos nacionales no ciudadanos también pueden ser nacionales, siempre que se cumplan ciertos requisitos de residencia de los padres antes del nacimiento del hijo.
Existe también una disposición especial para habitantes de las Islas Marianas del Norte que se convirtieron en ciudadanos por una ley especial pero que tuvieron la opción de elegir el estatus de nacional en lugar de ciudadano dentro de seis meses después de cumplir dieciocho años.
Derechos y limitaciones de los nacionales no ciudadanos
Los nacionales estadounidenses que no son ciudadanos tienen varios derechos importantes, pero también enfrentan limitaciones significativas en comparación con los ciudadanos plenos.
Entre sus derechos, los nacionales pueden vivir y trabajar en cualquier parte de Estados Unidos sin restricciones migratorias. No necesitan visa ni permiso de trabajo.
También pueden obtener un pasaporte estadounidense (aunque este pasaporte incluye una anotación especial que indica que el portador es nacional de Estados Unidos, pero no ciudadano). Este pasaporte les permite viajar internacionalmente y recibir protección consular de embajadas y consulados estadounidenses cuando están en el extranjero.
Los nacionales tienen, además, derecho a la protección de la Carta de Derechos de Estados Unidos además de las leyes de su gobierno territorial.
Pueden beneficiarse de algunos programas federales como el Seguro Social, aunque no todos los programas están disponibles para ellos.
Sin embargo, las limitaciones son importantes.
Los nacionales no ciudadanos no pueden votar en elecciones federales. Esto significa que no pueden elegir al presidente, senadores o representantes al Congreso. En cambio, los territorios como Samoa Americana eligen un delegado sin derecho a voto que representa sus intereses en la Cámara de Representantes, pero que no puede votar en asuntos legislativos.
Tampoco pueden postularse para cargos electivos federales ni ocupar ciertos puestos gubernamentales que requieren ciudadanía, especialmente aquellos que necesitan autorización de seguridad. No tienen acceso a todas las becas y ayudas federales que están reservadas exclusivamente para ciudadanos.
En términos de impuestos, los nacionales no ciudadanos que viven en sus territorios generalmente están exentos de pagar impuestos federales sobre ingresos generados dentro del territorio. Sin embargo, los territorios pueden implementar sus propios sistemas tributarios que a menudo reflejan el sistema federal.
¿Un nacional puede convertirse en ciudadano estadounidense?
La buena noticia para los nacionales estadounidenses que no son ciudadanos es que tienen un camino relativamente directo hacia la ciudadanía completa. No necesitan primero obtener una Green Card, como lo haría un extranjero.
El proceso de naturalización para nacionales es similar al de los residentes permanentes legales.
Primero deben establecer residencia en uno de los estados de Estados Unidos. Luego pueden presentar el formulario N-400, que es la solicitud de naturalización.
El proceso incluye demostrar presencia física y residencia continua en Estados Unidos, aprobar un examen de ciudadanía que evalúa conocimientos sobre historia y gobierno estadounidense, demostrar habilidad para leer, escribir y hablar inglés básico, y finalmente prestar el juramento de lealtad a Estados Unidos.
Una vez que completan la naturalización, los nacionales se convierten en ciudadanos plenos con todos los derechos y responsabilidades que esto conlleva.
Esto incluye el derecho al voto, la capacidad de postularse para cargos públicos, acceso a más oportunidades de empleo gubernamental y la posibilidad de patrocinar a más familiares para inmigrar.
Por qué importa esta distinción
Aunque la diferencia entre nacional y ciudadano puede parecer técnica, tiene consecuencias prácticas importantes para las personas afectadas y sus familias.
Con respecto a las peticiones familiares, los ciudadanos tienen mayores opciones. Pueden patrocinar a sus padres, hermanos e hijos casados para que obtengan residencia permanente. Los nacionales no ciudadanos no tienen estos mismos derechos de petición familiar.
En cuanto a la participación política, la incapacidad de votar significa que los nacionales no ciudadanos tienen menos influencia directa en las decisiones políticas que afectan sus vidas. Su representación en el Congreso es limitada a un delegado sin voto.
Para quienes viajan con frecuencia, aunque ambos grupos tienen pasaportes estadounidenses, la anotación especial en el pasaporte de un nacional puede generar confusión o preguntas adicionales en ciertos contextos diplomáticos o políticos internacionales.
En el ámbito laboral, muchos puestos gubernamentales federales, estatales y locales requieren ciudadanía plena. Esto limita las opciones profesionales de los nacionales no ciudadanos.
Documentación del estatus de nacional
Aunque el Departamento de Estado recibe ocasionalmente solicitudes de certificados de estatus de nacional no ciudadano, el gobierno determinó que crear un documento separado sería ineficiente, dado el bajo número de solicitudes.
En su lugar, los nacionales no ciudadanos pueden solicitar un pasaporte estadounidense que identifica claramente su estatus.
Este pasaporte indica que el portador es nacional de Estados Unidos, pero incluye la nota específica sobre su estatus de no ciudadano.
Para obtenerlo, los solicitantes deben completar el formulario DS-11 y presentar documentación que pruebe su estatus de nacional no ciudadano, así como su identidad.
Consideraciones para la comunidad inmigrante
Si naciste en Samoa Americana o la Isla Swains, es importante entender que, aunque tienes derecho a vivir y trabajar en Estados Unidos sin restricciones, puedes beneficiarte de obtener la ciudadanía completa mediante naturalización. El proceso es accesible y te otorgará derechos políticos y oportunidades adicionales.
La distinción entre nacional y ciudadano es un ejemplo de las complejidades del sistema de inmigración estadounidense.
Aunque todos los nacionales estadounidenses tienen una conexión legal fuerte con el país y derecho a vivir aquí permanentemente, solo aquellos con ciudadanía completa disfrutan de la totalidad de derechos políticos y oportunidades que ofrece Estados Unidos. Para los nacionales que deseen obtener estos derechos adicionales, el camino hacia la ciudadanía está abierto y es relativamente accesible.

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